Por: Edwin Rodríguez Lugo
Los dueños de motoras acuáticas alzaron su voz de reclamo para exigirle a la gobernadora trato igualitario, luego que se les excluyera de las embarcaciones que pueden navegar como actividad recreacional, mientras permanezca la cuarentena.
“Hemos sometido una demanda en contra del gobierno de Puerto Rico, en el tribunal de San Juan, para que se atienda esta situación, ya que la ley que regula la navegación en las aguas de Puerto Rico, incluye en su definición de embarcación a las motoras acuáticas. A pesar de esto, se nos excluyó, discriminando contra un solo tipo de embarcación”, indicó el licenciado Gabriel Oliveri Miranda.
El principal portavoz del movimiento antidiscriminatorio explicó que: “Esta exclusión, sin duda alguna, es uno de los temas más controversiales de esta nueva orden ejecutiva, ya que en Puerto Rico puede haber sobre 10 mil motoras acuáticas y es un vehículo utilizado por un alto porcentaje de ciudadanos”.
Olivieri Miranda explicó que: “La gobernadora pudo regular el uso de las motoras acuáticas, permitiendo una sola persona por motora para prevenir el contagio del Covid-19″. En una lancha, velero o catamarán van desde ocho hasta veinte personas a la misma vez y así no se respeta el distanciamiento social. No hay un argumento en derecho que justifique prohibir el uso de motoras acuáticas”.
Como parte de sus esfuerzos para lograr trato justo el abogado explicó que, el pasado 30 de mayo del 2020, sobre 100 dueños de motoras acuáticas, participaron en una manifestación pacífica que finalizó frente al Capitolio. “Hasta el momento ni los abogados del gobierno, ni el licenciado Rafael A. Machargo Maldonado, secretario del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), ni nadie se ha comunicado con nosotros o ha dado cara sobre el particular. Por esta razón, el próximo viernes, 12 de junio del 2020 llevaremos a cabo otra manifestación frente a las oficinas del DRNA”.