La escasez de guantes, mascarillas y la amenaza de que el COVID-19 invada las instituciones penales del País mantiene en alerta tanto a los confinados como a los oficiales de corrección alrededor de toda la Isla.
Ante esta situación, la presidenta del sindicato Alianza Correcional Unida (ACU) Jessica Martínez Santini indicó, que “a pesar de que hemos sido bien enfáticos en exigir protocolos y unos artículos para garantizar que el virus no entre a las instituciones, la queja mayor que hay es la entrega de mascarillas y me consta que hay mascarillas, pero hay mucho menos de las que realmente quisiéramos”.
La líder principal del gremio indicó a La Voz Digital de Puerto Rico que el viernes pasado tuvo oportunidad de suplir con guantes y mascarillas el complejo correccional de Ponce y está semana suministró en Guayama. “Por esta razón, les estamos pidiendo a los oficiales correccionales que sigan el protocolo establecido y que los supervisores sean responsables de brindarnos las mascarillas y los guantes para evitar que ese virus tenga contacto con los confinados”.
“En las instituciones visitadas he visto una población penal cooperando y no te voy a negar que ellos están exigiendo que los oficiales entren a los módulos con mascarillas y guantes. Ante esta situación, han realizado querellas administrativas a la agencia para poder garantizar sus derechos. Por eso es tan importante que los oficiales tengan ese control de prevención y que los supervisores nos brinden esos materiales para poder entrar a la población”, sostuvo la presidenta.
Martínez Santini, explicó que, como parte de protocolo establecido, hasta el momento, “En el Departamento de Corrección se está promoviendo y orientando a los oficiales para que cada vez que entren a una institución se laven las manos. De igual forma, se le está tomando la temperatura, por lo que cualquier empleado que arroje más de 38 grados no se le permitirá la entrada y tendrá que ir donde su médico de cabecera para que certifique que no está contagiado”.
En cuanto al protocolo establecido en caso que de que alguno de los confinados arroje positivo al virus, la oficial de corrección, dijo que los casos identificados “serán aislados en otras instituciones que han habilitado para tratarlos”.
Sobre el plan establecido a seguir en el caso de que algún empleado se exponga al virus, Martínez Santini, reconoció que “No se sabe cuál va ser el plan a seguir con los oficiales correccionales, ya que en el protocolo se estableció que la Secretaria Auxiliar de Seguridad será la encargada de encabezar el plan con los oficiales”.
“En estos momentos nuestra preocupación y exigencia es que esos protocolos se respeten, por eso estamos exhortando a los supervisores que sigan las instrucciones que el Secretario brindó, que nos den los artículos disponibles y que continuemos fomentando lo que es el lavado de manos”, reiteró la empleada del sistema correccional.
“Esta situación no la podemos trabajar como si fuera algo de uso y costumbre, aquí hay que hacer las cosas como están establecidas en el reglamento y en el protocolo, respetando las instrucciones. Esto no es para interpretación, ya que el protocolo es preciso y claro. Vamos a darle los guantes y las mascarillas a los oficiales para que todos podamos prevenir el contagio en las instituciones penales”, finalizó Martínez Santini.