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La paternidad corresponsable, también conocida paternidad activa, implica la participación equitativa de los padres en la crianza, con presencia emocional, participación en tareas domésticas y compromiso en las actividades de los hijos. Esto fomenta la comprensión, la apertura emocional y relaciones familiares más saludables.
La paternidad corresponsable es importante porque brinda beneficios en el desarrollo de la niñez, como una mayor estabilidad emocional, comprensión de los sentimientos y reducción de comportamientos agresivos. También promueve un mejor desempeño académico, habilidades sociales adecuadas y relaciones familiares más cercanas y saludables. En general, contribuye al bienestar y desarrollo positivo de la niñez, sentando bases sólidas para su vida futura.
El Informe sobre la Paternidad del año 2017, resultado de una campaña global para promover que hombres de todas las edades se involucren en el cuidado de sus hijos con equidad de género y sin violencia, pone de manifiesto que los padres activos son más felices, tienen mejor salud física y mental, tienen menos estrés y es menor el riesgo de que sufran accidentes o abusen de alcohol y drogas. (Regalía, 2017).
A continuación, se presentan las siguientes recomendaciones para promover una paternidad corresponsable:
- Aprovecha el tiempo con tu hija o hijo para mostrar afecto, usando el juego y la creatividad como tus aliados. Puedes decirles que este es su tiempo especial para compartir, y durante este rato guardar tu celular u otras distracciones.
- Apoya con los estudios y tareas escolares.
- Estar pendiente a cualquier asunto que pueda afectarles y procurar prevenir daños que puedan sufrir.
- Aporta a establecer rutinas o calendarios con tus hijos e hijas.
- Participa activamente de la rutina de los niños y las niñas, bríndate la oportunidad de aprender.
- Realiza actividades del hogar vinculadas a la salud e higiene, como por ejemplo cocinar y hacer tareas de limpieza.
- Dialoga y disciplina a tus hijos e hijas de forma no violenta, con respeto y cariño.
- Recuerda que la paternidad no es una ayuda a la madre, es un ejercicio con igual responsabilidad a la que tiene la figura materna. ¡Trabajo en equipo!
- Vive y disfruta tu paternidad.
- Consulta con recursos de apoyo o buscar información en Internet si sientes que se agotan las herramientas.