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La delantera puertorriqueña Karina Socarrás se encuentra ya en Madeira, Portugal, donde reposa y se recupera de una cirugía efectuada el pasado lunes en la ciudad de Porto.
Socarrás recibió un cabezazo en el lado izquierdo de su rostro en el partido del pasado 17 de enero frente a Sporting Braga, y fue sacada de cancha en ambulancia.
“Fue en los últimos minutos de juego. Ya habían pasado los 90 minutos de juego, estábamos como en el 92. Fue un balón largo que sacó nuestra portera. Yo iba de lado a recibir ese balón, claramente corriendo de espalda de una manera perfilada y cuando voy a cabecear, pues la defensa central de ellas me cabecea en el rostro. Ella viene de frente y yo vengo de espalda y no la veo venir. Solo sentí el golpe arriba”, narró Socarrás en entrevista telefónica desde su residencia en Portugal.
“Cuando caí al piso y me toqué la cara, sabía que algo se había roto porque sentía mi rostro diferente y el dolor llegó espectacularmente rápido y fuerte. El rostro se me hinchó y el ojo se me cerró. Todo fue muy rápido y me sacaron en ambulancia. Hasta me tuve que ir sola porque nadie podía tener contacto conmigo por el protocolo de seguridad del COVID-19”, continuó Socarrás, quien el pasado año debutó con el Club Sport Marítimo de Madeira en la Liga BPI – Primera División del Campeonato Nacional de Fútbol Femenino de Portugal.
La futbolista boricua, quien se ganó su lugar de regular con el club portugués, vivió semanas de incertidumbre para conocer si la operarían tras varias consultas médicas.
“Comencé a sentir los huesos fuera de lugar mientras bajaba la inflamación. Podía sentir que había más de una fractura; el dolor ya era insoportable”, confesó Socarrás. “Me vieron tres médicos especialistas diferentes y el 25 de enero me llevaron a ver otro doctor. Él, al verme y tocarme el rostro, me dijo que necesitaba operación. Hablamos con el seguro del club y me enviaron a Porto para hacerme la operación el 1 de febrero con este médico especialista en maxillofacial. Hicimos todas las pruebas en medio de esta pandemia para poder viajar, y gracias a Dios la operación se pudo hacer como él quería que era mover los huesos, y cayeron en su sitio”, detalló la futbolista, de 27 años de edad.
Socarrás tendrá su visita de seguimiento el próximo 15 de febrero mientras, se mantiene en reposo y alimentándose de líquidos y comidas suaves según lo recomendó el médico. Ayer, jueves, se sintió mejor y llegó hasta el estadio para ver a sus compañeras entrenar.
“Quería que ellas vieran que estoy bien, que me estoy recuperando y que siempre estaré para ellas. Al momento que me toque entrar nuevamente, ahí estaré”, manifestó la integrante de la Selección Nacional.
Por los nuevos casos de COVID-19, la liga suspendió varios partidos y los atrasaron hasta finales de febrero, por lo que Socarrás alberga la esperanza de estar lista para ponerse el uniforme de Madeira nuevamente en un futuro cercano.
Sobre la concentración de la Selección Nacional en República Dominicana, a la que no podrá asistir, Socarrás dijo que “veo un equipo de jugadoras talentosas. Hay componentes interesantes”.
“Estoy tranquila porque lo vi venir al momento cuando me pasó esto (lesión en el rostro), y lo más importante es que no es una competencia oficial. Sé que vendrán otras fechas y estaré siempre para el equipo”, concluyó.