Desde que se desató la pandemia del COVID-19 las mascarillas se han convertido en un accesorio esencial de la rutina diaria, al punto de que en algunos países, como en Puerto Rico, han implementado el uso obligatorio de las mismas como requisito para salir a la calle. Ante esta nueva realidad, el doctor Fernando Cabanillas conversó con La Voz Digital PR sobre la importancia de usarlas al salir y prevenir el contagio.
“La idea de las mascarillas no es protegerte a ti, es proteger a las demás personas. En Estados Unidos, en muchas ciudades, no es obligatorio el uso, y se puede ver a simple vista, como esto le ha jugado en contra”, resaltó Cabanillas.
“En Puerto Rico la razón por la que se ha podido controlar esta epidemia, mejor que en Estados Unidos, es por la disciplina que se ha seguido en cuanto a su uso y aun tenemos la oportunidad de seguir trabajando por el bienestar y la protección de todos”, aseveró el médico, diciendo que pocas veces ha visto en la calle personas sin la protección.
En cuanto a qué mascarillas son las más efectivas el Doctor reconoció, que son las N95 las que realmente protegen, ya que tienen un sello bastante efectivo en los lados, y prácticamente casi todo el aire que entra por la mascarilla está filtrado. Cabanillas aseguró que hay dos formas de contagiarse: una por las microgotas y otra por el aerosol, ósea, partículas que están suspendidas en el aire, que pueden tener el virus, aunque esta última, no es una forma muy común de llegar a tener COVID-19.
Con relación al polvo del Sahara y las personas asmáticas, Cabanillas aconsejó utilizar mascarillas quirúrgicas, ya que las de tela son más incómodas. “Al principio me cuestione acerca el uso de las mascarillas de tela porque realmente no son mascarillas que están diseñadas para proteger, pero se ha comprobado que son efectivas”, indicó.
Para concluir el galeno, recomendó a no rehusar las mascarillas, a menos que debido a la escasez no exista otra alternativa. Asimismo, hizo hincapié en el tema de los guantes y explicó que, “no debería permitirse su uso, ya que en la mayor parte de los casos dan una sensación falsa de seguridad, cuando realmente son muy peligrosos y es mejor lavarse las manos”.