La Comisión de Educación, Arte y Cultura del Senado que preside la senadora Brenda Pérez Soto, evaluó hoy en vista pública el Proyecto del Senado 4, de la autoría del presidente senatorial Thomas Rivera Schatz. Esta medida propone crear la “Ley de Integración de Valores y Ética” para desarrollar, implementar e integrar principios de valores y ética en el currículo del Departamento de Educación (DE) con el propósito de fomentar el respeto y la equidad entre las personas.
“Este proyecto viene a buscar soluciones, nos falta mucho por hacer, porque queremos transformar las vidas de los niños en el presente y futuro… Ya existe una política pública de integración para lo que pretende este proyecto, lo que buscamos es que haya legislación oficial”, expresó Pérez Soto.
Para Jorge Arturo Martínez Otero, estudiante de cuarto año de la Escuela Abelardo Martínez Otero y de la Escuela Libre de Música de Arecibo, la legislación es clave para fortalecer la unión en las comunidades escolares, reducir la criminalidad y mejorar la convivencia en Puerto Rico.
“Considero necesario que se refuercen los valores y la ética en la escuela y que sea parte del currículo del Departamento de Educación… Poco a poco, los estudiantes comenzarán a respetarse entre sí, y los que somos minoría, nos volveremos mayoría. Entenderán lo que es convivir con gente que tiene distintas ideas, creencias, descendencia, entre otros… Me gustaría invitarlos a pensar con perspectiva del futuro y de manera visionaria. Este proyecto, sería una pieza clave para llegar al Puerto Rico que buscamos y anhelamos”, reflexionó el joven
El propósito de la medida es fomentar el respeto, la equidad y la responsabilidad social en el estudiantado, asegurando que sus decisiones se basen en un análisis moral y en el impacto de sus acciones en la comunidad.
La medida establece la creación de un plan de implementación supervisado por un Oficial de Cumplimiento, quien será responsable de coordinar la capacitación docente, fiscalizar el desarrollo del currículo y fomentar la participación de la comunidad escolar en estos esfuerzos. Además, la ley ordenaría la transparencia en la divulgación de los materiales educativos y garantiza el derecho de los padres y encargados a participar en la educación de sus hijos.
Por su parte, la licenciada Saraí Ruiz Maisonet, en representación del DE, sostuvo que el Proyecto busca fortalecer la formación en valores dentro del sistema educativo, alineándose con la Ley 85-2018 y el currículo del DE. Destacó que la iniciativa promueve el desarrollo de ciudadanos responsables, con pensamiento crítico y compromiso con el bien común. Además, la integración transversal de la ética en el currículo contribuirá a reducir el acoso escolar y la violencia, fomentando una convivencia armoniosa.
“La integración de valores y ética en el currículo escolar no solo beneficia a nuestros estudiantes de forma individual, sino que tiene impacto positivo en la sociedad puertorriqueña en general, al promover la convivencia pacífica, la justicia social y el desarrollo sostenible”, afirmó Ruiz Maisonet.
En cuanto a la aplicación de la medida, se recomendó establecer el programa Salud Emocional en Acción, siendo esto 12 horas contacto sin que exista un aumento en la carga administrativa, para medir la efectividad de la enseñanza en valores.
El senador Rafael “Rafy” Santos expuso que “está en nuestras manos romper las cadenas negativas que afectan a nuestros niños. Nosotros tenemos que estar ahí para proteger a nuestros estudiantes”. En este contexto, Gisela Ríos Torres, representando al DE, indicó que se trabajará en el desarrollo profesional de los docentes con apoyo del equipo de desarrollo socioemocional.
“Tenemos personal capacitado en cada región educativa. Planeamos llevar a cabo estas capacitaciones en horarios de salón hogar, dos miércoles al mes, con la participación directa de los maestros”, explicó Ríos Torres.
A nivel operativo, la ley prevé un período de transición antes de su implementación oficial, asegurando que el personal docente reciba la capacitación necesaria para aplicar estos principios de manera efectiva.
Por su parte, la doctora Lydia Silva Boschetti, de la Cámara de Comercio de Puerto Rico, expresó su apoyo a la medida, afirmando que “representa una oportunidad invaluable para transformar el sistema educativo puertorriqueño en un espacio de formación integral donde los valores, la ética, el respeto y la equidad sean pilares fundamentales en nuestra sociedad”.
No obstante, recomendó un plan piloto que consistiría en la creación de un comité especializado a crear el manual estandarizado para estudiantes de cuarto año “Manual de Destrezas Profesionales y Sana Convivencia Social 2025-2026”.
“Este manual consistirá en pequeñas reflexiones relacionadas a un tema específico las cuales pueden ser leídas en cinco minutos, una vez a la semana, por el maestro del salón hogar… Será desarrollado por un comité especial compuesto por psicólogos, consejeros y trabajadores sociales, así como por funcionarios designados por el secretario para asistir y colaborar con la Oficina de Cumplimiento”, agregó. También, recomendó que la participación en estas capacitaciones se convierta en un requisito para la graduación.
De igual forma, el vicepresidente de la Asociación de Maestros de Puerto Rico (ASMR), Raúl González Colón, respaldó la medida por su alineación con la misión de la organización de fomentar la equidad y la integridad en la educación pública.
“El Departamento de Educación debe tener un rol protagónico en estos esfuerzos, y que se le debe nutrir de todos los recursos necesarios para cumplir con las metas y objetivos que se tracen para obtener resultados favorables. Los valores deben trabajarse desde todos los espacios, incluyendo los hogares. Sin embargo, los procesos formativos que se dan en las escuelas permitirán integrar y definir estos esfuerzos con mayor facilidad”, añadió.
Sin embargo, adelantó que, aunque el proyecto no es uno nuevo, ya que actualmente el Departamento de Educación cuenta con integración de valores y ética en conceptos, destrezas y actitudes que forman parte de los currículos de cada materia, ahora busca cambios estructurales que permiten brindar orden en esos esfuerzos.
A preguntas de la presidenta de la Comisión, el vicepresidente de la ASMR anticipó que se estará reuniendo con el secretario del DE, Eliezer Ramos Parés para delinear el propósito y metas precisas del Departamento para con este Proyecto de Ley.
Asimismo, el administrador Auxiliar de Prevención de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) Juan Rivera Meléndez comentó que se posicionan a favor de la legislación. “El desarrollar un currículo educativo que integre el conocimiento y valores éticos, basado en comportamiento humano a nivel social, educativo y emocional, fortalece los factores de protección y disminuye los factores de riesgos, encaminado en desarrollar niños y adolescentes resilientes. Es implementar un estilo de vida saludable y plena, aceptándose y responsabilizándose, donde tenga herramientas para manejar sus emociones, preocupaciones y conflictos”, destacó.
A su vez, la presidenta de la Asociación de Psicología de Puerto Rico (APPR), Yesenia Delgado Castillo se mostró a favor del PS 4 aunque con enmiendas y recomendó que se enfoque en el aprendizaje socioemocional en lugar de limitarse a valores y ética.
Igualmente, argumentó que “aunque el proyecto establece la designación de un funcionario del Departamento de Educación como Oficial de Cumplimiento que asistirá al Secretario en el desarrollo e implementación de la Ley, con el propósito de que el currículo desarrollado sea uno efectivo y que responda a las necesidades actuales en el contexto único de Puerto Rico, recomendamos que la creación de un Comité Multidisciplinario para colaborar con el Secretario y el Oficial de Cumplimiento”.
En contraste, tanto el Colegio de Profesionales de Trabajo Social de Puerto Rico (CPTSPR) como la Asociación Puertorriqueña Pro Bienestar de las Familias (PROFAMILIAS) se posicionaron en desacuerdo con la medida, pues entienden que la iniciativa no debe ser una actividad curricular, más bien tener un compromiso de crear una comunidad ética en su propio funcionamiento.
“Creo en una supervisión y evaluación continua constante, el Proyecto lo que provee es una integración total… Esto no lo podemos ver como un curso separado, tenemos que verlo como una integración en todo… El Proyecto busca que ese estudiante pase de un nivel a otro con unos valores éticos y haya clarificado lo que trajo desde su hogar”, sentenció la senadora Migdalia Padilla Alvelo.