El Colectivo RedRUM del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM), participó por primera vez en el 48 Hour Film Project Puerto Rico, presentado por el Puerto Rico Film Festival, y obtuvo el Premio de Mejor Dirección de Arte, gracias al trabajo de la estudiante Laura Teresa Del Rosario Martínez Torres. La competencia, que reúne a cineastas y creativos en un reto de creatividad y rapidez, consiste en escribir, filmar, editar y entregar un cortometraje original en tan solo 48 horas.
“Esta primera participación como colectivo colegial, compuesto por estudiantes, exalumnos y profesores, inicia un ciclo para que los estudiantes del Certificado de Cine y todos los interesados en este tema en el RUM puedan continuar participando en representación de la institución. Queremos ir moviendo la aguja para el oeste y demostrar que acá también estamos haciendo cine. Felicito a Laura y su equipo de trabajo por este gran logro, así como a la treintena de jóvenes que se integraron al proyecto y aceptaron el desafío de producir cine en solo dos días”, sostuvo el doctor Hugo Ríos Cordero, catedrático asociado del Departamento de Inglés y cocoordinador del Certificado de Cine en el Recinto.
De hecho, para Laura, del Departamento de Ciencia Animal, con concentración de Preveterinaria y quien cursa el Certificado de Cine, esta premiación es muy especial, ya que también ofrece clases de arte, al igual que su progenitora.
“Cuando recibí la noticia, me quedé en shock. Había visto los otros cortometrajes y la competencia estaba muy fuerte. Por eso, este logro tiene un significado especial: es nuestra primera participación y algunos de los otros equipos provenían de casas de producción con muchos más recursos. Me siento profundamente agradecida y emocionada”, sostuvo.
Los codirectores del filme, Carhianie J. Vargas Padín, egresada del Departamento de Inglés, y Miguel A. Sierra Bartolomei, egresado del Departamento de Ciencia Animal, ambos del Certificado de Cine del RUM, compartieron su emoción por el reconocimiento.
“Nos llenó de mucha emoción e ilusión. No lo esperábamos. También fue un momento agridulce porque, como exalumnos, esto representa un paso de batuta y un cierre de ciclos con el Colegio. Fue bien bonito trabajar en un último proyecto junto a los estudiantes actuales”, expresó Carhianie.
Miguel coincidió en la importancia del logro. “Me enorgullece volver a mi alma mater y participar. Fue bonito colaborar con otros jóvenes que van a continuar lo que hemos trabajado por años para que siga dando fruto. Ganar el premio en nuestra primera participación es emocionante porque demuestra que el Colegio tiene mucho que aportar a la industria cinematográfica. Sabemos que no somos los primeros y no seremos los últimos, porque viene una ola de alumnos motivados”, dijo.
Por su parte, Ríos Cordero explicó la dinámica del evento.
“La competencia va desde el viernes por la noche hasta el domingo. El viernes recibimos el género o los dos géneros que debemos usar, un personaje, una línea de diálogo y un objeto obligatorio. En nuestro caso, el viernes escribimos el guion, el sábado filmamos y el domingo editamos. Tenía que estar listo a las 7:30 p.m. del domingo. Es fascinante porque nos obliga a pensar en colectivo y resolver en el momento”, añadió.
Mientras, Carhianie detalló los lineamientos específicos que recibieron.
“La competencia da algunos ‘pies forzados’ que serán iguales para todos los equipos. Por ejemplo, debía tener un personaje que se llamara Raymond o Ramona Díaz, quien tenía que ser maestro o maestra de arte. El objeto tenía que ser una bombilla y, entonces, la línea de diálogo que debía aparecer era: ‘Dáselo a Lupita, ella sabrá qué hacer’. En el caso del género, era particular para cada equipo. En nuestro caso, nos tocaron las opciones de hacer un proyecto de acción o de aventura, o un proyecto single room en el que toda la historia ocurre dentro de un solo espacio. Al escribir el guion, terminamos haciendo ambos”, relató.
Así nació el cortometraje Tiro al blanco, con la colaboración de los colectivos colegiales The Red RUM Film Club, Cinemateque y TeatRUM, grabado en el Recinto.
Para lograr este proyecto, se integró un equipo multidisciplinario que asumió diversos roles en la producción. La ficha técnica incluye la dirección a cargo de Carhianie y Miguel; el guion escrito por Ríos Cordero e Ilé N. Rosario Martínez; y la producción ejecutiva de Ríos Cordero, junto a los productores Ilé, Christofer A. Valdez, Carhianie, Miguel y Jorge A. Santiago Fernández, con Yamil Méndez Figueroa como productor asociado. La dirección de fotografía y edición fue realizada por Jorge; la continuidad por Sebastián Colón Avilés y Miguel Morales Ramos; y la dirección de arte por Laura, asistida por Lisa Mileny Sepúlveda Recio, Alana M. Mo Vélez y Emmanuel Alonso Rodríguez. El equipo técnico incluyó a Yamil Méndez Figueroa y Jeanmiliz López Suárez como asistentes de dirección; Diego J. Vera Acevedo y Emmanuel E. Guadalupe Rodríguez como asistentes de cámara; Ember Álvarez Malpica en sonido; Edgardo Yair Hernández Torres como boom operator; y Jamian Cortés Díaz como gaffer. El vestuario estuvo a cargo de Andrea Rodríguez; el maquillaje y peinado por Joyce D. Inglés y Marién Villanueva Vega; la música por Hugo Gabriel; el diseño de afiche por Christofer A. Valdez; y el behind the scenes por Alaila S. Segarra Cumpiano. El equipo contó, además, con los asistentes de producción Saekin García González y Paulo G. García Berríos, y con el servicio de catering de Maricarmen Brito Díaz.
El reparto incluyó a Ríos Cordero como hombre de negro; Ilé como estudiante #1; Alana como estudiante #2; Marién como Ramona Díaz; Wendell Kenai Rivera Estévez como estudiante #3; Ferdinand I. Beltrán Cruz como estudiante #4; Ainhoa I. Angueira Chévere como estudiante #5; Jeanmiliz como estudiante #6; Saekin como estudiante #7; y Natalia Z. Graciano Pastoriza como estudiante #8.
Ríos Cordero concluyó con una visión a futuro del cine colegial.
“Llevamos más de 20 años con el Certificado de Cine y ahora estamos dando pasos para convertirlo en un bachillerato y, más adelante, en una maestría única en Puerto Rico. Queremos un programa que combine la parte técnica, artística, teórica e histórica, e involucre a todas las facultades. La industria del cine es grande y queremos que se vea que en el oeste se puede hacer cine”, puntualizó.
