La representante del Distrito 37 (Loíza, Río Grande y Canóvanas) y también presidenta de la Comisión de la Región Este, Carmen Medina Calderón, celebró -esta tarde- el hecho de que la Cámara de Representantes de Puerto Rico aprobó el proyecto de la Cámara 281, de su autoría y de la oficina de su homólogo, Jerry Nieves Rosario, que tiene como norte el tema de la erosión costera.
La legisladora había levantado también su voz de preocupación, hace algún tiempo, por la problemática de la erosión costera en el Municipio de Loíza.
“Para añadir un inciso (y) al Artículo 5 de la Ley Número 23, del 20 de junio de 1972, según enmendada, conocida como la ‘Ley Orgánica del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), a los fines de otorgarle al DRNA la autoridad legal para intervenir, sin solicitud previa, en situaciones de emergencia, relacionadas con la erosión costera… La intención es que pueda tomar acción inmediata para llevar a cabo mejoras o proyectos de mitigación, a corto plazo”, expuso en el documento ya aprobado por la Cámara Baja.
De acuerdo con la representante, la situación que se encuentran protagonizando los conductores que transitan por las costas de Loíza es sumamente peligrosa. Pues, según ella, las marejadas ya llegan a las mismas.
“Los efectos del cambio climático ya son más que evidentes en las costas de Loíza… ¡El alza en el nivel del mar es constatable! Y, está invadiendo la tierra, amenazando así campos de cultivo, viviendas, carreteras y zonas de ocio, como las playas”, hizo hincapié.
“Si el agua sigue subiendo, sin duda alguna, muchos residentes del área se verán obligados a abandonar sus hogares y mudarse a otra zona”, insistió.
“Algunos de los puntos claves para la erosión costera son: el Cambio Climático, es decir, el aumento en el nivel del mar e intensificación de tormentas, oleaje constante, en otras palabras, Loíza, con su costa expuesta al mar, sufre del embate constante del oleaje fuerte, y pérdida de vegetación costera, en otras palabras, la deforestación de dunas y manglares reduce la protección natural contra la erosión”, explicó.
“Ya la erosión costera, en Loíza, está afectando, muy seriamente, carreteras, áreas recreativas, centros comunales y casas”, aseguró la legisladora del Partido Nuevo Progresista (PNP).
“En comunidades como Loíza ya estamos viendo cómo el mar se lleva nuestras playas, carreteras y hogares. No podemos esperar a que los procesos burocráticos retrasen la acción… Con esta medida, le damos, al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), la autoridad para intervenir de inmediato y proteger la vida y propiedad de nuestra gente… Este es un asunto muy preocupante para Loíza y las demás costas de Puerto Rico”, expresó la representante Carmen Medina Calderón.
El cambio climático ha intensificado la vulnerabilidad de las zonas costeras en Puerto Rico. La erosión amenaza no solo los ecosistemas, sino también la estabilidad económica, turística y social de muchos municipios.
La medida busca dar respuesta concreta y efectiva a estas emergencias, facilitando una respuesta gubernamental rápida y eficiente.
“El Distrito 37, que representamos consumo orgullo y compromiso inquebrantable, está compuesto por comunidades altamente expuestas a la erosión costera… Esta legislación es un paso firme hacia la protección de nuestros recursos naturales y de las familias que viven cerca del mar… La adaptación climática no puede seguir esperando”, añadió.
La medida fue referida a la Comisión de Recursos Naturales, del Senado de Puerto Rico, para su correspondiente evaluación.