La alcaldesa de Ponce, Hon Marlese Sifre Rodríguez anunció la firma de un decreto del programa Ponce Build Up para el Museo de Arte de Ponce (MAP), que concede exención de arbitrios de construcción con un valor estimado de $1.2 millones, a fin de acelerar la reconstrucción del edificio histórico afectado por los terremotos de 2020.
“Hoy reafirmamos, con acciones concretas, el compromiso de Ponce con su cultura. Con este decreto de Ponce Build Up ayudamos a que el Museo de Arte de Ponce —símbolo de nuestra identidad y orgullo— entre en fase de obra con mayor agilidad. Queremos verlo reabierto, vivo y atrayendo miles de visitantes cada año”, expresó la Alcaldesa de Ponce, Marlese Sifre Rodríguez.
Este decreto municipal se suma a los esfuerzos de financiamiento público y privado ya en curso. En julio de 2025, la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP) transfirió $6.3 millones para reparaciones y mejoras; el proyecto se estima en $24 millones, con reembolso de hasta $18 millones por parte de FEMA, según OGP. La expectativa divulgada es completar los trabajos en aproximadamente 18 meses a partir del inicio de obra.
Desde 2020, el edificio principal —obra del arquitecto Edward Durell Stone— permanece en proceso de reparación por daños concentrados en el segundo piso (grietas y desprendimientos). La colección se mantuvo segura y el Museo continuó activo en su anexo y mediante exhibiciones itinerantes en Estados Unidos, preservando su misión educativa y turística para Ponce.
“El Museo de Arte de Ponce es un pilar cultural y económico de nuestra ciudad. Cada paso hacia su reapertura significa más visitantes, más actividad en nuestra zona urbana y más oportunidades para nuestros comerciantes y empresarios. Con Ponce Build Up estamos no solo preservando un ícono de nuestra identidad, sino también impulsando la economía local”, expresó Jean Paul González, director de Desarrollo Económico del Municipio de Ponce.
Sobre Ponce Build Up. Programa municipal que otorga incentivos a proyectos de reconstrucción y preservación —incluida la exención de arbitrios de construcción— a propiedades históricas y de alto impacto turístico afectadas por los sismos de 2020, con el objetivo de acelerar obras, proteger el patrimonio y dinamizar la economía local.