Por: Lolimar Gómez Torres
Solo restan horas para que los colegios de votación cierren sus puertas y culmine el proceso de primarias. Sin duda aunque la suerte está echada para los candidatos que buscan una silla en el servicio público, lo cierto es que estas primarias y próximas elecciones generales serán muy atípicas a años anteriores.
Aunque muchos ejercerán su derecho al voto de forma íntegra, la gran mayoría tiene el ojo puesto en las propuestas presentadas por los candidatos. A juzgar por la respuesta de la gente y el pulso en la calle, el electorado está extenuado de tantas promesas, propuestas e ideas inconclusas. Ya no resulta tan fácil para un candidato convencer a la gente. Ya no basta con ser un político tradicional, sino que ahora la gente espera un aspirante de menos palabra y más acción.
A esto se le suma que se viven tiempos muy difíciles; una pandemia, que aún no hemos logrado ni siquiera controlar, por lo que esto amenaza la participación en el proceso. Los estragos que han provocado los temblores en la zona sur del País. Y como si fuera poco, los daños que provocó el paso de una tormenta por nuestra zona. Se necesita mucho más por parte de aquellos que van a gobernar a Puerto Rico, aspirante a las alcaldías y a formar parte de la Legislatura.
Se necesita mucho más que caras bonitas y figuras decorativas en el gobierno. Líderes comprometidos que no se enamoren del poder, que reine la integridad en el servicio público. Que se alejen de los estilos pasados y que logremos rescatar nuestro País.
