Los propietarios de las hospederías de la zona oeste exigieron acción de inmediata al gobierno, ante los recientes casos de personas ahogadas en playas y ríos de la Isla.
El propietario del parador Boquemar en Boquerón, Cabo Rojo, Ángel Rodríguez indicó que mes tras mes los hoteles y alojamientos han informado y orientado a sus huéspedes cuando una playa no es apta para nadar. Sin embargo, ciertas personas ignoran el mensaje y arriesgan su vida. “Podemos hacer las mejores campañas posibles, pero debemos poner una responsabilidad a cada visitante de hacer caso a los avisos para evitar una desgracia”, enfatizó Rodríguez.
El empresario reiteró que se debe hacer una campaña más agresiva y que incluya a la empresa privada para alertar cuando las condiciones marítimas no son aptas para el uso de los diferentes cuerpos de agua. Añadió que continuamente se está poniendo en peligro la vida de los rescatistas por las irresponsabilidades de ciertas personas que no hacen caso a las advertencias de peligrosidad emitidas por el Servicio Nacional de Meteorología.
Rodríguez propuso que cuando se activan los equipos de rescate y salven a un bañista, que sabía de antemano que había oleaje fuerte, se debe cobrar monetariamente a esta persona por su negligencia de arriesgar la vida, tanto de él como del personal de manejo de emergencias. Recomendó que cuando las condiciones marítimas en la zona norte no son aptas para bañistas y operadores de embarcaciones pequeñas, que utilicen las playas o balnearios de la zona sur y oeste por tener aguas más tranquilas.