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A horas de la celebración de las elecciones generales, aprovecho este espacio para hacer un llamado a la reflexión. En dos días el país tiene, nuevamente, la oportunidad de escoger los líderes que regirán la gestión pública de Puerto Rico. Como pueblo está en las manos de cada uno de ustedes y en las mías, el poder para lograr un mejor país.
Sin duda, la política tradicional en Puerto Rico y en el mundo experimentan un cambio nunca visto. La composición del Senado por primera vez contó con senadores de partidos políticos emergentes y una amplia participación de mujeres. A pesar de que la percepción y las redes sociales den la impresión de un rechazo a los partidos tradicionales la realidad es que son estos quienes cuentan con la estructura para manejar asuntos políticos y gubernamentales.
Le toca al país realizar un voto a conciencia, por convicción y estudiado así como analizado, fuera de pasiones o de lo que esté trending en las plataformas digitales. Les invito a que revisen los programas de gobierno de cada uno de los candidatos de forma objetiva, compare las propuestas de estos y determine cuáles de ellas ofrecen la posibilidad de un mejor país.
Un país en el cual se cancele el contrato de Luma Energy y se inicie un plan concreto para robustecer el sistema de energía eléctrica que por su ineficiencia cuesta la pérdida de enseres, de alimentos y vidas. Un sistema de energía en el cual los costos son tan onerosos que familias tienen que escoger entre comprar alimentos o pagar la luz.
En las manos de todos está el poder para lograr un mejor país, en donde el acceso al servicio de agua potable permita que las familias reciban, ininterrumpidamente, el servicio al cual tienen derecho. La falta de acceso al agua potable también le costó al país vidas. Además tiene un impacto en los presupuestos de las familias quienes hacen malabares para realizar actividades como lavar ropa, cocinar, entre otros.
Todos tenemos en las manos el poder a un mejor país donde la infraestructura vial esté en óptimas condiciones y sirva como motor para el desarrollo económico. Se necesitan vías de rodaje seguras, iluminadas, para garantizar el fácil y rápido desplazamiento y la seguridad de todos.
Un mejor país significa contar con políticas públicas definidas y en armonía con los mensajes que se envían desde el gobierno central en temas como la violencia de género, la comunidad sorda, salud y la población de adultos mayores. De nada vale decretar Estados de Emergencia para atender estos temas si se carecen de acciones que garanticen la ejecución de un plan real.
Este próximo martes, les invito a escoger a quienes desde sus ejecutorias evidencien su compromiso con el país en vez de con los amigos del alma. Vote por aquellos que mejor les representan, que cuenten con la mayoría en la Cámara de Representantes, en el Senado y en las alcaldías para poner en marcha un mejor país. Juntos se puede.