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El 2 de noviembre, con ocasión del Día de los Fieles Difuntos, millones de personas alrededor del mundo acuden a los cementerios para recordar a sus seres queridos, una tradición promovida por la Iglesia Católica. En el Marco de esta celebración y en un esfuerzo de llevar consuelo y esperanza a las familias en este día, la Pastoral Juvenil Arquidiocesana (PJA) y Servicios Funerarios Católicos (SFC) se unen para realizar la jornada Misión Esperanza cuyo objetivo es acompañar en oración a los que visitan los cementerios para honrar a sus queridos, y llevarles mensaje de consuelo y esperanza.
Según el diácono Enrique Resto Vargas, coordinador de Relaciones con la Comunidad y Familias de SFC, “el Dia de los Fieles Difuntos, celebrado por la Iglesia Católica cada 2 de noviembre, es una fecha especial en la que los fieles recuerdan y oran por aquellos que han fallecido. Misión Esperanza tiene como propósito proporcionar apoyo espiritual y emocional a las personas que participan en esta tradición.”
Durante la jornada, grupos de jóvenes voluntarios visitarán algunos cementerios para orar junto a las familias, ofrecer palabras de consuelo y entregar mensajes de esperanza cristiana. Este gesto busca recordar la promesa de vida eterna y la comunión que existe entre los vivos y los muertos en la fe católica. “Queremos que nuestros jóvenes sean un faro de esperanza y compasión en este día tan significativo. Con su presencia, no solo brindan apoyo a quienes lloran a sus seres queridos, sino que también reafirman la fe en la resurrección y la vida eterna que celebramos como católicos” explicó Resto Vargas.
Los cementerios que se estarán visitando son: Braulio Dueño y Nacional de Puerto Rico en Bayamón, La Piedad en Cupey, Los Ángeles Memorial Park en Guaynabo y los cementerios municipales de Toa Baja, Guaynabo, Morovis y los cementerios que pertenecen a la Diócesis de Fajardo. En cada cementerio se ofrecerán misas en diferentes horarios. Aquellos familiares que así lo deseen podrán proveer el nombre del difunto para ser mencionado durante la celebración de la misa. A esto se añade un programa de misas en las parroquias donde SFC ha establecido columbarios.
“La experiencia de acompañar familias en los cementerios e invitarlas a orar por sus seres queridos, por su alma, es una experiencia transformadora para aquellos que, aún con el paso de los años, el dolor los agobia. Pero en la oración y la educación les devolvemos esa luz de esperanza” expresó Michelle A. Cartagena, propietaria del proyecto de emprendimiento católico Lumier Benier PR y participante de la jornada Misión Esperanza.
Misión Esperanza se originó en la Arquidiócesis de Montevideo, Uruguay en el año 2018. SFC adoptó la iniciativa en Puerto Rico la que también cumple el propósito de reforzar y promover entre todas las generaciones la tradición de orar por los fieles difuntos.
Previo a las visitas a los cementerios, a los jóvenes participantes de Misión Esperanza se les prepara para el encuentro con los visitantes en los diferentes cementerios mediante una catequesis. “Ese día nuestros jóvenes se convierten en misioneros de paz. En el contacto con cada persona transmitirán el sentido cristiano de ese día basado en la esperanza de la Resurrección” explicó el Diácono Enrique Resto.
Actividad de Clausura
La Jornada Misión Esperanza celebrará una actividad de clausura en el cementerio La Piedad en Cupey el sábado, 2 de noviembre de 2024. La actividad iniciará con el rezo del rosario a las 12:30 p.m. Luego se celebrará una misa que será presidida por el Obispo Auxiliar, Monseñor Tomás González. En esta celebración se leerán los nombres de los difuntos cuyos familiares proveyeron a los jóvenes durante sus visitas a los cementerios.
Para más información sobre las visitas a los cementerios y programa de misas accede a la página de Facebook bajo el nombre Servicios Funerarios Católicos.
Origen la celebración del Día de los Fieles Difuntos
Como cada 2 de noviembre, la Iglesia Católica celebra el Día de los Fieles Difuntos. Este día es una conmemoración y un día festivo religioso en el que la Iglesia busca honrar el recuerdo de quienes ya no siguen en la vida terrenal, pero aún no pueden gozar de la presencia de Dios, porque están purificando, en el purgatorio, los efectos de sus pecados. Todas las iglesias católicas dedican la liturgia a animar a los fieles a orar por el eterno descanso de quienes han muerto y encontrar la presencia de Dios.
El origen del Día de los Difuntos data del año 998, cuando fue instituido por el monje benedictino San Odilón de Francia. Este monje sugirió la idea de crear un día en el que se honrase a los muertos. Su idea fue bien aceptada por otras congregaciones siendo la primera de ellas en aceptarla la Diócesis de Lieja en el año 1000, hasta ser aceptada como fecha en la que la Iglesia lo celebra.
La celebración fue adoptada por Roma en el siglo XVI y a partir de entonces comenzó a rememorarse entre los católicos de todo el mundo. Miles de personas visitan los cementerios este día, ofrecen rezos y asisten a la misa para honrar la memoria de los fallecidos. El sentido cristiano de ese día es la esperanza a la Resurrección.