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Recientemente un jurado encontró culpable al productor Sixto George, por cargos de extorsión, intento de extorsión y destrucción de evidencia en el juicio en su contra que se llevó a cabo en el tribunal federal. Más allá del veredicto emitido, lo discutido durante el proceso judicial levanta serios cuestionamientos sobre el manejo de la información pública que se ventila a través de los medios de comunicación.
Nombres de reconocidas figuras de los medios de comunicación alegadamente y según uno de los testigos del caso, recibían dinero, por parte del ahora acusado, a cambio de ensalzar o destruir la reputación de funcionarios de gobierno. Entre los mencionados se encuentran Roque Gallart “Rocky The Kid”, Jorge Pabón “Molusco”, Angelique Burgos “Burbu”, y el locutor Tomás Ramos Cruz “Red Shadow”. Además, según el testigo en una reunión sostenida con el productor, éste le ofreció crear una sección de buenas noticias en el programa Nación Z. Ese espacio sería para que la administración Rosselló hablara bien sobre su gobierno.
Como relacionistas, en especial los vinculados al gobierno, sabemos cuánta influencia ejercen las figuras públicas mencionadas en las audiencias y también sabemos cuán cuesta arriba se hace en ocasiones lograr que nuestro mensaje rebase tales percepciones. Si lo ventilado en el juicio sobre el intercambio de dinero es verdad y en efecto hay personas dentro de los medios de comunicación que se prestan para este tipo de acto, nos toca a los relacionistas orientar a nuestros clientes de las consecuencias de pagar para manipular la opinión pública.
Un relacionista sabe que para los medios de comunicación lo más importante es el contenido. Comunicar información o contenido que sea veraz, que supla las necesidades de ese medio, que carezca de errores o lagunas, es la garantía al éxito. Desarrollar una relación con los medios de comunicación basada en la transparencia, seriedad y compromiso también es parte fundamental para que reconozcan la calidad del trabajo que realizamos.
Una vez los compañeros periodistas, los que trabajan en las mesas y en las producciones reconocen que la información que usted provee sobre su cliente contiene elementos noticiosos e impacta a un significativo grupo de la población, por mencionar algunos ejemplos, tenga la certeza de que la información será considerada y publicada.
Pagar por un espacio en los medios se llama publicidad. Pagar para dañar la reputación de una empresa o persona, para manipular la opinión pública además de irresponsable, denota falta de conocimiento de la labor que se realiza, falta de contenido y es ilegal. Como estrategas es nuestra responsabilidad conocer nuestra función y la de los medios de comunicación. Somos los responsables de evitar las tan conocidas “Fake News”. Somos los responsables de brindar información veraz, noticiosa y de alto contenido para nuestros públicos.
En mi experiencia, si la información que brindamos tiene los elementos descritos, si establecemos relaciones responsables, en las cuales el profesionalismo y la seriedad resalten, el resultado será de mutuo beneficio. Para eso no tenemos que pagar, tenemos que hacer bien nuestro trabajo.