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Las cuatro puertas de doble hoja están abiertas y dan a la calle, como en los buenos tiempos. La casa es grande, de familia numerosa, de dos pisos en madera y con patio interior. Al llegar se pisan las lozas criollas de diseños intrincados, muy apreciadas y únicas en el mundo. Es la antigua Casa Espada construida entre 1828 y 1850, y al caer en desuso, se deterioró hasta que llegó el buen día en que el alcalde de Cayey, Rolando Ortiz Velázquez, determinó que el municipio adquiriera la propiedad en el año 2003 para restaurarla, y entregársela al pueblo como un centro cultural, musical y artístico. Así nació la Casa Histórica de la Música Cayeyana, que ubica frente a la recién remodelada plaza pública Ramón Frade León.
“Esta es una propiedad única que está inscrita en el Registro Nacional de Lugares Históricos de Washington como Casa Espada Cervoni, y la resturación fue trabajada cuidadosamente con carpinteros y trabajadores con cuidadoso asesoramiento y siguiendo un respecto absoluto a los materiales originales”, señaló el Alcalde.
Al terminar las labores restaurativas, Ortiz Velázquez acordó que la administración de la Casa estuviera en manos de un grupo de músicos cayeyanos bajo el concepto de voluntariado, donde ya superan los cincuenta (50) individuos, entre músicos y amantes de la música. “Nosotros tenemos bohemia todos los viernes y sábado de 7:00 a 11:00 de la noche y los domingos abrimos a las 11:00 de la mañana, con la música iniciando a la 1:00 de la tarde, hasta las 6:00 de la tarde”, informa Andrés Yambó, director ejecutivo de la Casa.
“Nosotros amamos la música en todas sus dimensiones y por eso educamos a las nuevas generaciones. Ofrecemos clases de cuatro puertorriqueño, guitarra y güiro, como parte del Programa de la Escuela de Bellas Artes de Cayey. También educamos musicalmente en barriles de bomba, conga y bongó. Particularmente importante es que ofrecemos clases en ritmos tropicales para personas con Siíndrome Down”, añade Yambó. Para los interesados, deben ser enviar un correo electrónico a la dirección musicacayeyana@gmail.com, para obtener detalles.
La Casa es además hace acopio de piezas auténticas, fotografías y documentos originales de personalidades como César Concepción, Pedro ‘Pedrín’ Vázquez Flores, Paquito López Vidal, Trío Los Yeica, Chuito El de Cayey, Ana Dolores Maldonado, las Hermanas Castillo, Herminio de Jesús, Dr. Stacey López Rivera, así como Wisin y Yandel, Alexis y Fido y naturalmente, la Tuna Estudiantina de Cayey.
En una mesa, se exhiben varios discos de la famosa agrupación dirigida por Juan Ángel Nogueras, con arreglos corales y musicales de Cándida Luz Rivera. La Navidad puertorriqueña inicia, sin duda alguna, con melodías como ‘A la Zarandela’, ‘Alegre Vengo’ y ‘Pastores a Belén’, entre tantas otras.
La fama de la Casa Histórica de la Música Cayeyana ha llegado lejos desde su inauguración el 13 de agosto de 2017. “Aquí llegan personas de todo Puerto Rico, muchos boricuas de la diáspora que saben la importancia de la cultura por sus padres y abuelos. Incluso gente de México y Colombia que nos siguen en las redes sociales, planifican sus viajes y previa parada en Guavate, llegan a disfrutar de la música”, añade Yambó. Para más información, los interesados pueden acceder a ‘Casa Histórica de la Música Cayeyana’ en la red social Facebook.