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Durante años, las diversas gerencias de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) han sido incapaces de solucionar el serio problema del suministro de agua en los barrios de Morovis, donde por un lado se anuncian alegados proyectos y subastas, pero por el otro no hay un plan claro y específico que exponga en blanco y negro cuál es la situación y cómo la piensan solucionar. Lo más insólito es que las facturas llegan mensualmente sin fallar.
“En lo único que han sido eficientes es cobrando y amenazando a las familias con cortar el servicio si no pagan, ¡pero es que pasan semanas enteras sin agua!, es el reclamo de la alcaldesa Carmen Maldonado González, quien informó mediante un mensaje en las redes sociales emitido anoche, que nuevamente tendrá que destinar fondos municipales para contratar más camiones cisternas para la distribución de agua en las comunidades, y que los tres camiones de ese tipo propiedad del Municipio, no dan a basto para servir a tantos vecindarios sin agua.
“Nuestros empleados van casa a casa ayudando a las familias afectadas, dando prioridad a todos los ciudadanos encamados, pero llevamos años con este problema y la gerencia de la AAA no puede, no quiere, o no sabe lo que hay que hacer. Es la única explicación que tenemos porque si bien atienden nuestras llamadas y asistimos a reuniones de todo tipo, pasan los años y el problema es peor”, señaló Maldonado González. En estos momentos los Barrios Morovis Sur, Barahona, San Lorenzo y Río Grande sin servicio, que son los que más población concentran.
“La paciencia de nuestra gente va a tener su límite, porque llevan años escuchando excusas. No hay sensibilidad, no hay responsabilidad en la AAA. Es duro decir esto, pero esas son sus actuaciones, de mediocridad absoluta”, añadió la alcaldesa. La crisis obligó al Municipio a adquirir dos camiones cisterna en Estados Unidos luego del paso del Huracán María, con la esperanza de paliar la situación en lo que la AAA cumplía sus promesas de hace cuatro años.
Recientemente, el Municipio adquirió con fondos propios cientos de cisternas para ir distribuyendo gratuitamente a las familias más necesitadas, con personas en edad avanzada o con impedimentos, para ayudarlos a manejar la situación. “La gerencia regional de la AAA conoce todo esto, la presidenta ejecutiva Doriel Pagán sabe lo que pasa porque nos hemos reunido en varias ocasiones, hasta el gobernador Pedro Pierluisi me recibió en el Centro de Convenciones de Miramar, le expliqué los detalles personalmente, pero todas las semanas sin fallar tenemos comunidades o barrios enteros sin agua”, añade Maldonado, quien trató el cuatrienio pasado de llegar hasta los entonces gobernadores Ricardo Rosselló y Wanda Vázquez Garced, pero se negaron a recibirla.
“En la comunicación más reciente con la gerencia regional, nos indican que ahora el problema son los alegados salideros. Antes eran las lluvias, o las represas con sedimentos, igual la falta de conexiones eléctricas de las bombas. Todas las excusas están en la memoria de nuestra gente, pero continúan sin agua. Esa es la realidad que vivimos todos los días”, finalizó Maldonado González.